Análisis semanal: El giro a lo bizarro en la política nacional y la fortaleza de los liderazgos provinciales
En su desesperación por sumar votos, candidatos y figuras centrales de los dos espacios políticos de alcance nacional tiraron por la ventana todos los manuales de comunicación política que se escribieron hasta la fecha e iniciaron una frenética carrera por llamar la atención de cualquier manera, siguiendo aquel viejo y discutido adagio del marketing que asegura que no existe la mala prensa.
Impera la incontinencia verbal y escasea el sentido del ridículo. Victoria Tolosa Paz, cabeza de lista del Frente de Todos en el distrito más grande del país, nos recuerda que en el peronismo siempre “se garchó” como si esa predisposición al sexo casual los hiciera de alguna manera más aptos para el manejo del Estado.
En un intento por darle algún contexto teórico al comentario de despedida de soltero, habló luego del “derecho al goce”, un concepto interesante pero que no aparece entre las prioridades de los habitantes de una provincia asolada por la pobreza, la delincuencia y la falta de oportunidades laborales.
Cuando todavía nos preguntábamos qué estaría pensando Tolosa Paz cuando dijo lo que dijo, salió María Eugenia Vidal a su rescate. En la misma línea de su recordado éxito: “Nadie que nace en la pobreza llega hoy a la universidad”, la exgobernadora de Buenos Aires devenida en precandidata porteña salió a comentarle al mundo que no es lo mismo fumarse un porro en Palermo que hacerlo en una villa.
Más allá de considerar que en el paquete barrio del norte porteño los consumidores de Marihuana despuntan el vicio para “relajarse” y en las villas lo hacen rodeados de narcos, Mariú no abundó en mayores explicaciones, con lo cual su intervención se redujo a una mera expresión de clasismo.
Pero si de incontinencia verbal se trata, nadie mejor que Mauricio Macri. Hasta hace poco tiempo empujado a las sombras y acusado de piantavotos por los propios compañeros de partido que ahora reclaman su presencia porque no consiguen despegar solos, el expresidente se siente empoderado y habla.
Y como suele ocurrir cuando habla, termina del otro lado de la banquina. Entre otras cosas que dijo esta semana, dejó la siguiente frase: “va a haber un aire nuevo el lunes diciendo: ‘bueno, o cambien o se van’”. El pronóstico de un novedoso aire parlante y destituyente no tardó en interpretarse como una expresión golpista por parte del oficialismo.
Macri de nuevo se la dejó picando y sin arquero. “La verdad que llama mucho la atención que un ex presidente se maneje de ese modo sobre los mandatos constitucionales. Lo que se elige son proyectos legislativos que van en esa dirección, no hay un mandato constitucional que esté concluyendo”, respondió el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero que de paso aprovechó para recordarle al expresidente que el mandato de Fernández termina en 2023.
El espectáculo de tropiezos en las campañas en Ciudad y provincia de Buenos Aires debilita los liderazgos nacionales y refuerza los provinciales. Una muestra de eso pudo verse el domingo pasado en las elecciones de Corrientes en las que el gobernador Gustavo Valdés se impuso por más de 50 puntos de diferencia al candidato del Frente de Todos, Fabián Ríos.
Al kirchnerismo siempre le resultó difícil hacer pie fuera del AMBA y de Santa Cruz, el pago chico de los Kirchner, a pesar de manejar delegaciones provinciales de organismos nacionales –cómo la ANSES- con extensa presencia territorial. Les costaba durante las presidencias de Cristina, con un país en mejores condiciones económicas, y les cuesta mucho más ahora con menos recursos para manejar.
Las últimas encuestas realizadas en Misiones también dan cuenta de ello. Los sondeos anticipan para las PASO de la semana próxima una distribución de votos similar a la de las elecciones provinciales de junio, en las que el Frente Renovador obtuvo un amplio triunfo.
Pero de cara a noviembre la situación es todavía más preocupante para la oposición.
Las internas en Juntos por el Cambio y el Frente de Todos escalaron hasta provocar fracturas y cuesta creer que los candidatos de estos espacios que pierdan en las primarias vayan a apoyar a quienes resulten ganadores en esos frentes. Especialmente teniendo en cuenta que quien no sea cabeza de lista en la oposición no tendrá chances de llegar al Congreso.
Por el grado de dispersión que presentan –tres listas en el Frente de Todos y cinco en Juntos por el Cambio- difícilmente estos frentes puedan alcanzar en las generales de noviembre los votos que obtuvieron en las PASO.
Reactivación contrareloj
Como todos sus antecesores, el Gobierno de Alberto Fernández gestiona la economía mirando el calendario electoral. La impericia de las administraciones nacionales para generar un crecimiento más o menos sólido y sostenido en el tiempo, sumerge al país en una serie indefinida de altibajos. La estrategia de todos los gobiernos para que las crisis no se los lleven puestos es siempre la misma: buscar que los períodos de crecimiento coincidan con los tiempos electorales.
Producto de ello es que Argentina sea el único país del mundo en el que se habla de economía de años pares y de años impares. En los años pares los gobiernos están más dispuestos a la disciplina fiscal que en los impares, es decir en los que hay elecciones.
Después de la caída de casi 10 puntos del PBI en 2020 el Gobierno confiaba en poder generar un rebote relativamente rápido este año, pero no lo consiguió, al menos no en los tiempos previstos.
Recién en el segundo semestre comenzaron a levantar los índices que mueven el humor electoral, como el consumo de productos masivos. De acuerdo con el último informe de la consultoría Scentia, el consumo creció 1,7% interanual en julio y registró el primer resultado positivo desde abril de 2020, en el inicio del aislamiento impuesto por la pandemia.
Las ventas en supermercados, autoservicios, mayoristas y almacenes tuvieron variación interanual positiva del 1,7%, mientras que en detalle las ventas de las grandes cadenas se incrementaron 5,4% y hubo una caída de 1,4% en los autoservicios y comercios de proximidad.
Con el ojo puesto en el cronograma electoral, el Gobierno dispuso una batería de medidas para cumplir aquello de “poner plata en el bolsillo de la gente”. Tarifas pisadas, dólar atado, aumentos salariales, mejoras para monotributistas, reducción de ganancias, limitaciones a las exportaciones de carnes y todo el combo acompañado por una porción grande de endeudamiento en pesos para evitar que la emisión de moneda termine recalentando la inflación.
No es un plan para el largo plazo ni pretende serlo, con suerte alcanza para pasar noviembre, después se verá.
Está todo dado para que los próximos tres meses sean de mejora para la economía personal de la mayoría de la gente.
El problema para el Gobierno es que aunque consiguiera en los próximos tres meses consolidar el repunte de la economía, llegaríamos a mediados de noviembre con números muy bajos en comparación a cualquier otro punto de la historia reciente en aspectos clave como pobreza, ingresos medidos en dólares y niveles de consumo.
¿Qué pesará más en la mente del electorado: el repunte que muestra el corto plazo o la debacle del último año y medio? De la respuesta que tenga esa pregunta dependerán en buena medida las chances electorales del oficialismo nacional.
A diferencia de sus antecesores, el Gobierno de Alberto tiene un plus a su favor cuando se habla de economía y es que el principal frente opositor tampoco tiene ningún logro para mostrar en esa área. “Con Macri nos fue peor y eso que no había pandemia”, es por estos días el argumento más sólido que repiten desde el Gobierno para defender su propia gestión.
Definiciones concretas
En materia de política provincial, lo más relevante pasó por la conferencia de prensa que brindó el presidente de la Legislatura y conductor de la renovación Carlos Rovira el jueves en la Escuela de Robótica.
Sin buscar confrontaciones, pero con mucha claridad en el concepto, Carlos Rovira recordó las negaciones históricas que tiene el país con la provincia, que incluso datan del no reconocimiento de Andrés Guacurarí como prócer nacional. “Es importante tener y apoyar a nuestros representantes, que son los que van a hacer valer las cosas en el Congreso de la Nación, van a defender los recursos que no viene desde el país que, de federal tiene la enunciación, pero en el armado institucional, la Nación nos debe más de 10 veces de lo que generamos los misioneros”.
Rovira no ocultó el descontento por las históricas postergaciones a las que el Gobierno nacional (no solamente el actual) somete a Misiones, pero aseguró que la renovación no se quedará en el lugar de la queja sino que siempre se propondrá superar esas postergaciones apelando a la educación como principal herramienta para el desarrollo.
“Hoy Misiones es vanguardia en la economía del conocimiento, como lo es en la salida de la crisis económica en nuestro país. Es la provincia que más está creciendo, que más está recibiendo inversiones, pedido de inversiones, radicación de empresas”, sostuvo el conductor del Frente Renovador.
“Hoy Misiones es vanguardia en la economía del conocimiento, como lo es en la salida de la crisis económica en nuestro país. Es la provincia que más está creciendo, que más está recibiendo inversiones, pedido de inversiones, radicación de empresas”, sostuvo el conductor del Frente Renovador.
En cuanto a las elecciones, dijo que Misiones pretende fortalecer su voz en el Congreso, después de haber anticipado las elecciones provinciales en junio “apelando al respeto de los valores primarios de la provincia, a nuestros intereses” con la premisa de “resolver los problemas actuales y los del futuro, de las próximas generaciones” al ser el único espacio que hablan de lo que le interesa a la sociedad.
En ese marco, dijo que “la economía local tiene un boom con el tercer sector, el del conocimiento y la economía digital, que viene de la robótica. Somos vanguardia en crear ese trabajo; el Silicon Misiones es el cuarto jugador del esquema que comienza con el nivel inicial, la escuela de robótica y la secundaria de innovación, donde los jóvenes se prepara para la salida laboral. Es una capacitación rapidísima y del mejor nivel del mundo para las nuevas tareas”.
El presidente del frente renovador explicó que las quejas por las inacciones del Gobierno nacional no resuelven los problemas que tiene Misiones.
“En política siempre recomiendo desarrollar ideas superadoras desde nuestro el espacio político; tenemos ideas para resolver el veto presidencial. La ley, suprema, existe, la hemos ganado para todos los misioneros. El veto la suspende temporariamente pero no atenúa nuestro esfuerzo, nuestra voluntad y nuestra participación. Con inteligencia, pero con pasión y con carácter, sin gritar y sin eslogan inadecuado” propone impulsar ideas para “para el desarrollo económico, de infraestructura, comercial, educativo, medioambiental y político”, dijo Rovira.
También habló de la ley de criptomonedas, tecnología blockchain y del próximo paso: “tokenizar para hacer efectivo, el activo ambiental”, como herramienta que ayude a Misiones en el mismo camino del mundo, que está “saliendo de la peor crisis que nos tocó vivir en estos tiempos de la mano de los mandatos locales, afianzados en la idea de que el territorio está dando oxígeno a todo el mundo con la selva que cuidamos solamente los misioneros” porque la Provincia no recibe nada por el cuidado ambiental.
“Los misioneros tenemos la primera ley de criptomonedas y blockchain de Latinoamérica. El próximo paso es tokenizar para salvaguardar y salir al mundo a hacer efectivo ese activo ambiental, con inteligencia, ante un país que también se opone a eso”, dijo.