El sacerdote Alberto Barros lamentó los índices de pobreza del país: “Nos tiene que doler como Nación llegar a donde estamos posicionados”
Si bien los datos reflejan un cambio en comparación al 2021, Barros explicó que tales estadísticas son las registradas hasta el mes de junio de 2022, y que el índice actual empeoró a raíz de la inflación que transcurre el país. Ante esta situación expresó que “la realidad es que la pobreza está golpeando a la mitad de nuestro pueblo. La gente que es más asalariada hoy también está teniendo complicaciones”.
En este contexto, el país tiene los recursos necesarios para producir materia prima y las dificultades que atraviesan las personas son producto de un proceso de decadencia: “Nos tiene que doler como Nación llegar a donde estamos posicionados”, sostuvo Barros.
También habló sobre las consecuencias de esta situación y consideró que en la actualidad se trata de un fracaso de la dirigencia política y empresarial que prioriza al pueblo por el simple hecho de ejercer poder: “Son incapaces de sentarse a dialogar para consensuar políticas de estado a mediano y largo plazo. Es una dirigencia que busca el poder y no el servicio de la gente”, resaltó.
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Sin embargo, consideró que el país puede salir adelante reconstruyendo sus valores morales e hizo hincapié en que la búsqueda del crecimiento implica en un hallazgo del desarrollo integral de las personas a nivel laboral, cultural, intelectual y espiritual. Por este motivo expresó que “el ambiente no es positivo, pero existen razones para salir adelante”.
Por otra parte, señaló que los niños necesitan comida para poder tener un rendimiento adecuado en su vida cotidiana: “El sector empresarial en el rubro de alimentos es fatal porque si no hay alimentos una vida se va deteriorando. Se puede apreciar en los barrios con los niños que comen mal y tienen un desempeño negativo en las escuelas, además de que muchos abandonan sus estudios. La gente come menos y en menor calidad”, alertó Barros.
Con respecto a las personas que cobran la Asignación Universal por Hijo y otros planes para poder subsistir con la asistencia del Estado, Barros no agregó opiniones sobre el uso de éstos, muchas veces criticado por la misma sociedad. “No diré nada al respecto porque hay mucho prejuicio, la maldad y la bondad no son propiedad de ningún sector social. La problemática no pasa por comprar un celular sino pasa por la pobreza y la alimentación”, afirmó.
Sin embargo, se refirió a aquellos que compran celulares o artefactos tecnológicos, lo cual no considera un lujo: “Hoy en día tener un celular no es un lujo, recordemos en pandemia familias que tenían muchos hijos y sólo un celular, la situación se les complicó. También la compra de un televisor, eso no hace la diferencia en la compra de alimentación, con 40 mil pesos no se da de alimentar a varios niños”, criticó.
Por último, explicó que el problema no recae solamente en el Gobierno sino que todos los ciudadanos debemos aportar para el crecimiento del país: “Todos deberíamos ser capaces de realizar un análisis de conciencia para darnos cuenta de las cosas que estamos haciendo mal como personas”, concluyó Barros.
La economía argentina se estancó en julio, pero acumuló en el año un crecimiento de 6,4%, según el INDEC @INDECArgentina https://t.co/TIbjv21Sy8
— misionesonline.net (@misionesonline) September 26, 2022
“Quiero llorar por mi Nación”, expresó el sacerdote Alberto Barros al conocer los últimos datos de pobreza e indigencia del país
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